Vela amarilla #Yellowcandle

Anoche encendimos una vela amarilla para sumarnos a la campaña #YellowCandle, la vela que mantiene viva la memoria de millones de víctimas de la Shoá (Catástrofe). Esta vela se enciende en la víspera del Yom Hashoá o Día de la Memoria de la Shoá, el 27 de Nisán del calendario judío, una iniciativa que pone nombres a los terribles números.

Junto a la vela un nombre, Erzsebet Blumenthal, quien fue asesinada en Auschwitz en el año 1944. Quise conocer su historia. Entré en la web de Yad Vashem y encontré su registro. Nació en 1883 en Romhany en Hungría, hija de Jeno y Anna estaba casada con Jozsef, vivía en   Szabadszallas (Hungría)  y era ama de casa. Murió en una cámara de gas en 1944 en Auschwitz (Polonia). También conservan su foto. 

Encender la vela amarilla en su memoria ayuda a reconstruir, a recordar a aquellas víctimas  con o sin descendencia, por eso de generación en generación Yom Hashoá permite conocer historias personales, ejercitar la memoria, evocar con una vela que mantiene vivo el recuerdo de Erzsebet y de todas las víctimas

Es también el momento de recordar el poema de León Felipe "Auschwitz"

Estos poetas infernales,

Dante, Blake, Rimbaud

que hablen más bajo...

que toquen más bajo...

¡Que se callen!

Hoy

cualquier habitante de la tierra

sabe mucho más del infierno

que esos tres poetas juntos.

Ya sé que Dante toca muy bien el violín...

¡Oh, el gran virtuoso!

Pero que no pretenda ahora

con sus tercetos maravillosos

y sus endecasílabos perfectos

asustar a ese niño judío

que está ahí, desgajado de sus padres...

Y solo.

¡Solo!

aguardando su turno

en los hornos crematorios de Auschwitz.

Dante... tú bajaste a los infiernos

con Virgilio de la mano

(Virgilio, "gran cicerone")

y aquello vuestro de la Divina Comedia fue una aventura divertida de

música y turismo.

Esto es otra cosa... otra cosa...

¿Cómo te explicaré?

¡Si no tienes imaginación!

Tú... no tienes imaginación,

Acuérdate que en tu "Infierno"

no hay un niño siquiera...

Y ese que ves ahí...

está solo

¡Solo! Sin cicerone...

esperando que se abran las puertas de un infierno que tú, ¡pobre

florentino!,

no pudiste siquiera imaginar.

Esto es otra cosa... ¿cómo te diré?

¡Mira! Éste es un lugar donde no se puede tocar el violín.

Aquí se rompen las cuerdas de todos los violines del mundo.

¿Me habéis entendido poetas infernales?

Virgilio, Dante, Blake, Rimbaud...

¡Hablad más bajo!

¡Tocad más bajo! ¡Chist!

¡¡Callaos!!

Yo también soy un gran violinista...

y he tocado en el infierno muchas veces...

Pero ahora, aquí...

rompo mi violín... y me callo.

#Yellowcandle  

@yellowcandlesp

@yellowcandleuk 

@maccabispain

@fcjecom

Interdiversity